La Primavera llega a la Cuadra. (a)

La Primavera llega a la Cuadra.

• Quedan algunos días para que los calendarios nos digan que ha llegado la Primavera, pero la naturaleza nos dice que ya ha llegado, los arboles florecen, la morera esta ya casi cubierta de hojas con los pájaros revoloteando por sus ramas, el ciruelo blanquea en todo su esplendor, cuando cuajen las flores en frutos, tendremos que apuntalar las ramas para que no se desgajen del peso de tanto fruto, como pasó el año anterior.

• La yegua llena la rasqueta de pelos al cepillarla, señal de que la muda del pelo está empezando y señala a la primavera.

• El nido de las golondrinas bulle de alegría con la pareja remozando el viejo nido y con los escarceos propios de una pareja que está buscando la perpetuidad de la especie.

• Los naranjos se llenan de blanco azahar con su fulgurante olor que nos dicen que la Semana Santa esta a la vuelta de la esquina y que es el pistoletazo de salida para que todas las Hermandades de penitencia realicen sus triduos o quinarios en honor de sus titulares.

• El campo se llena de variopintas flores, de todo tipo de especies, pero predominando los amarillos del jaramago, el blanco de las margaritas, los lilas de las malvas, que este año parece que van de gigantes, llegan y sobrepasan la altura de la yegua.

• Las perdices ya no elevan el vuelo al vernos pasar, rastrean la tierra y van esquivándonos por si descubrimos su nido donde ya preparan la nidada de los futuros perdigones, que tanda alegría nos dan cuando vemos una bandada de estos pequeños corredores que desaparecen como por encanto, al inmovilizarse sobre el terreno para despistar a los depredadores.

• En definitiva, a pesar de tanta agua, que ya nos sale hasta por las orejas, como dice el refranero, la Primavera está llegando y es una maravilla salir al campo para entrenar y disfrutar de la naturaleza florida, que a la vez disimula las malas artes de una parte de la población que ensucia los campos con el abandono de sus pertenencias en plena naturaleza en vez de llevarlos a los puntos limpios, que hasta el nombre lo tiene bonito, donde sin ningún problema y hasta con agrado reciben todos nuestros trastos sobrantes.

• Que esta nueva estación que está a punto de llegar a nuestros campos la disfrutemos con nuestros caballos en plena naturaleza.