Comportamiento de la Yegua en Celo. (a)
Comportamiento de la Yegua en Celo.
- Este es el articulo que me manda el Blog de Pavo, y no es que tenga demasiada importancia dentro de nuestra disciplina, pero siempre es bueno conocer las señales que nos muestran nuestras yeguas de competición cuando están en celos, ya que cuando se compite con una yegua en celos, son muchos los factores que pueden influir en su comportamiento, tanto en la carrera como en las presentaciones de los Vet-Gates.
- Si hay algún semental compitiendo, los problemas se agravarían, tanto para la yegua como con el comportamiento del semental, al que le podemos fastidiar el día de competición.
- Mi semental Val-Halcon, aquel tordo vinoso con el que competí varios años y que por motivo de subirle las pulsaciones al entrar en un picadero donde estaba el Vet-Gate, y como no era semental para cubrir, paso por las manos del veterinario para eliminarles sus atributos masculinos. A partir de ese momento, ya dejo de alterarse en los controles veterinarios.
- Y a colación de este incidente de un caballo entero, siempre he comentado y reflexionado, que en nuestras competiciones había que añadirles algunos artículos al Reglamento de Raid, para adaptarlo a los Sementales, ya que es muy complicado encontrar un semental que sea tranquilo en las recuperaciones y que pueda ser contrastado para dejarlo de padre en nuestra disciplina.
- Cuando un caballo destaca en la Resistencia Ecuestre, casi siempre este caballo está castrado, y así es complicado sacarle descendencia, cosa distinta seria que si adaptamos el Reglamento de Raid a los Sementales, a los mejor podíamos ver más Sementales como competidores dentro del mundo del raid.
- En otras disciplinas, donde las pulsaciones y recuperaciones, no entran en litigio para ganar una prueba, si vemos muchos sementales compitiendo y así, los que destacan, se usan como sementales y así dejar descendencia que puedan ser contrastados en la especialidad del padre ganador.
Este es el artículo de Blog de Pavo:
«Comportamiento de la yegua en celo
Los celos de las yeguas parecen contradecir los deseos de sus propietarios. Si tienes una yegua de deporte, odias que tenga unos celos pronunciados y, si tienes una yegua de cría, odias que tenga unos celos que pasen inadvertidos.
En el Blog de Pavo hablaremos de los diferentes comportamientos de la yegua en celo ya que su manifestación es muy variable de unas hembras a otras.
¿Cuándo salen en celo las yeguas?
En condiciones normales, sin intervención del hombre, las yeguas salen en celo a mediados o finales de primavera, época en que crece el pasto, que mejora su alimentación y su fertilidad. Además, así el potro nacerá al año siguiente en temporada cálida y con abundantes forrajes para alimentar a una madre que tendrá que producir leche a un ritmo muy elevado.
Las yeguas entran en celo con el aumento de las horas de luz que hay en primavera. La responsable de este hecho es la melatonina, una hormona que se produce por la noche y suprime el celo. De este modo, cuando disminuyen las horas nocturnas sin luz, disminuye la melatonina y las yeguas comienzan su ciclo estral.
¿Qué es el ciclo estral?
La duración media de un ciclo estral en las yeguas es de 21 días, que es el periodo de tiempo que va desde el primer día de celo hasta el día anterior al siguiente celo.
Tiene dos fases. La fase más corta es el estro o celo (5 – 7 días), prepara a la yegua para aceptar al semental. La fase más larga se llama diestro (14 -16 días) en la cual no hay síntomas de celo y el útero sufre una serie de cambios que lo preparan para la gestación.
Si la yegua se queda preñada en ese celo, el ciclo se termina aquí, pero si no hay gestación, la yegua vuelve a salir en celo una y otra vez cada 21 días. Por eso se llama ciclo.
Cuando los días empiezan a acortarse, la melatonina aumenta y las yeguas dejan de tener estos ciclos, y entran en anestro. Es una fase hormonal muy diferente al diestro, ese periodo sin celo que preparaba el útero para la gestación. En el anestro el útero está en descanso.
Síntomas en el periodo de celo o estro en las yeguas
En esta fase la yegua está receptiva al macho, y la monta y fecundación es posible.
La hembra permite que el macho se acerque y la huela. También orina frecuentemente, y su cola está elevada, a la vez que separa las extremidades posteriores y desciende la cadera. Relaja la vulva y produce reversión del clítoris en lo que en ganadería se llama “espejeo” o “parpadeo”.
Están mucho más alteradas y difíciles en el entrenamiento o la competición. Un celo muy manifiesto es una tortura para el jinete y una alegría para el ganadero.
Una yegua en celo permitiendo acercarse al semental
Todos estos síntomas son muy variables de una yegua a otra y algunas no los evidencian hasta que tienen al macho cerca o lo oyen relinchar. Por eso, muchas veces se usan sementales para recelo, es decir se acerca un semental para que la yegua, supuestamente en celo, lo revele claramente.
Por el contrario, cuando no están en celo, las yeguas no dejan acercarse al semental, agachan la cola, echan las orejas hacia atrás, o hacen señales de morder o cocear.
Celos silentes o silenciosos y celo inexistente
Algunas yeguas parecen (al ojo humano) no tener celo nunca, pero en realidad desarrollan los llamados celos silentes, que son fértiles, pero no se detectan porque no tienen los signos típicos. En estos casos el uso de un semental de recelo es fundamental.
En otras ocasiones las yeguas no presentan celo en la temporada reproductiva. Puede ser por el mal estado corporal (excesiva delgadez), desnutrición de algún tipo, edad avanzada o alguna enfermedad. El Cushing, por ejemplo, puede dar ciclos irregulares o incluso eliminarlos. Los tumores de ovario también producen alteraciones del celo.
Debes de consultar con tu veterinario para que descarte alguna patología, y mejorar su alimentación con el pienso y forraje adecuados, o algún suplemento para la fertilidad
Debes de mejorar su alimentación o aportar suplementos un tiempo antes del celo previsto para la monta. Algo similar a lo que ocurría en los sementales, en los que para mejorar su fertilidad tenías que mejorar su alimentación al menos 2 meses antes de la temporada de montas.
Una pequeña sorpresa
Otra de las razones de un celo inexistente, que no debes descartar, es que la yegua se haya quedado preñada. Es más frecuente de lo habitual que, por una escapada desde un box mal cerrado, o porque un semental sea poco temeroso de cercados eléctricos o mal construidos, una yegua en celo se convierta en una yegua en gestación y, por tanto, sin celo.
Celo del potro
Se llama así al celo que desarrolla la yegua a los 7-10 días del parto (aunque esta franja puede aumentarse). Es, por tanto, el primer estro postparto y puede ser fecundo.»
Fuente: Blog de Pavo Comportamiento de la yegua en celo.
Saludos de Gabriel.