Accidente de un Niño Durante una Clase: ¿Quién asume los gastos?

Nombre: Patricia Cremades

Mi hijo de 7 años comenzó clases de equitación en grupo. No había subido nunca a un caballo y el primer día, el caballo lo tiró. Estaba parado y comenzó a saltar hasta tirarlo. Tuvo una caída muy fea y se fracturó el húmero. Yo estaba fuera de pista, lo asistí y llamé al 112. Mientras estábamos en pista esperando la ambulancia, los caballos de los otros niños paseaban alrededor nuestro, en varias ocasiones tuve que empujarlos para que no nos chafasen.

La fractura tuvo que ser intervenida y le pusieron tornillos externos que habrá que extraer en un par de semanas aún.

A mi hijo lo federamos, porque nos lo pidió la hípica y ahora resulta que la federación nos dice que no podemos volver al hospital donde lo operaron, que no le cubre. No sabemos qué hacer ante esta situación. ¿Nos pueden orientar sobre cómo actuar ante este caso?

Creemos que la hípica no actuó correctamente, ni con la elección del poni, ni con la dirección de la clase, ni ante el accidente y tras él. Y ahora estamos inquietos por las posteriores visitas médicas, creemos que la retirada del material que lleva en el bracito (tornillos) se debería por el equipo médico que le operó (en la Seguridad Social). No sé si nosotros podremos asumir ese gasto de la Seguridad Social, si la federación no se lo cubre.

RESPUESTA DEL EXPERTO:

Fernando Acedo – Abogado Hípico

En los accidentes deportivos impera la teoría de la “asunción del riesgo”, que señala que en circunstancias normales, las consecuencias de una caída a caballo deben ser asumidas por el propio jinete, que conoce el riesgo potencial que esta práctica deportiva genera. Sin embargo, en este caso, esta teoría no debería aplicarse, ya que en edades tan jóvenes no puede afirmarse que estemos ante ningún riesgo aceptado por el alumno.

En mi opinión, cuando el accidente se produce durante la enseñanza de la equitación con alumnos tan pequeños, máxime cuando se trataba de su primera clase, existe una responsabilidad civil del centro hípico y/o del profesor de equitación, dado que a la vista del resultado se concluye que no se tomaron las medidas de seguridad adecuadas para evitar la caída de un alumno que no sabe solventar la situación provocada por la reacción inesperada del pony.

En situaciones similares, la jurisprudencia ha señalado que en las relaciones profesor alumno, el riesgo debe ser previsto y evitado en lo posible por el monitor, quien no puede refugiarse en la aceptación del riesgo del alumno o su inexperiencia, puesto que su ignorancia y escasa destreza en la equitación es inherente a su corta edad, lo que le exige extremar al máximo las medidas de seguridad.

Por todo ello entendemos que existiría base legal para exigir al centro hípico una indemnización por el daño sufrido, gastos médicos y de hospitalización, los días de impedimento que le produjo la caída y las secuelas que en su caso le hayan producido las lesiones, puesto que quien se lucra de una actividad que genera riesgos, y por tanto, susceptible de causar daños, debe responder de dichos daños, máxime cuando sus clientes son niños de muy corta edad y absolutamente inexpertos.»

Fuente: Ecuestre: consulta tus dudas del mundo del caballo.

Saludos de Gabriel.