El Buen uso de la Navaja del Caballista.

El Buen uso de la Navaja del Caballista.

• Todos los días con los caballos tienen sus enseñanzas y recuerdos de hechos acaecidos con estos amigos de entrenamientos. Esta mañana, cuando cambiaba el ronzal de la cabezada de cuadra de Hacedora, se me vino a la cabeza, el útil uso de la navaja en todo caballista, ya que hay veces que el uso de este artilugio le puede salvar la vida a nuestro caballo y a veces al jinete.

 

• El cambio de una cuerda de ronzal, muy apretada por el uso, es muy difícil  quitarla de manera manual, y eso que le apliqué la técnica de soplar el nudo. (¿Conocéis el truco de soplar los nudos para desatarlos?, consiste en soplar sobre los nudos y estos de suelen aflojar, pero no fue en este  caso). Así que me dispuse a cortarla con mi inseparable navaja colgada al cinto.

 

Y a esta practica navaja quiero dedicarle este articulo, para quien no la use, y sepa la falta que les puede hacer en el momento más inesperado.

 

• Antiguamente, no solo la usábamos para los quehaceres caballisticos, también nos servían para cuando abríamos las alforjas, cortábamos el pan,  las chacinas, ese tocino veteado puesto encima de ese pan de pueblo –parecido al que nos hace nuestro amigo Manuel Monge en su horno casero–  y también servía de tenedor para pinchar los pedacitos de tortillas caseras y los mil usos en las distintas comidas que nuestra madre nos ponía en las alforjas.

 

• Dejando los usos culinarios de nuestra navaja, pasamos a los usos que todo caballista puede hacer con este afilado utensilio.

 

• ¿Quien no ha buscado algún instrumento para hacer un agujero para acortar unas acciones de estribos y hacerle otro agujero más?, no es que salga un agujero para enmarcar, pero la navaja si que nos soluciona del apuro.  Cuando un ronzal se relia en el cuello de un caballo y este da un tirón, produciéndole una pronta asfixia, ahí esta la navaja salvadora.

 

Quiero recordar un accidente con un ronzal, estábamos en el reconocimiento previo en un Al-Andalus, en la aldea del Rocio (Huelva), punto de partida de ese años de esta mítica prueba, pues en este previo, cuando el veterinario reconocía a un caballo, lo vi sacar su navaja y corrió hacia un caballo enredado en el ronzal y empezando a sufrir de asfixia, cortó el ronzal y solucionado el problema. Si no hubiera sido por esta navaja, difícilmente se hubiera podido solucionar el problema, ya que el caballo al sentirse atrapado, tira y tira agravando la situación, y manualmente es imposible solucionar el problema.

 

• También en los cocheros, las navajas son de uso común, ya que con los arreos propios de cada tipo de enganche, hay muchas oportunidades para que los caballos se enreden con los tiros y sea imposible el desengancharlos. Aunque también hay cocheros que no las quieren ni ver,  un amigo cochero me comentaba, que cuando en la feria tenia un problema con los arreos, lo primero que decía a los que le rodeaban, !!No quiero ver una navaja!!, y él intentaba solucionar el problema sin que le cortaran los arreos.

 

• En un caso muy aparatoso y peligroso, como es cuando un caballista se estriba, y la acción de estribo no se desengancha de la charnela, la navaja es la única solución  salvadora del jinete.

 

• Otro de los usos de nuestra navaja, es la de limpia cascos, cuando en el campo, alguna piedrecita se incrusta en la ranilla y es imposible sacarla con la mano, ahí está nuestra navaja para hacer de palanca oportuna y solucionar el problema.

 

• En fin, la navaja, bien usada, es un elemento imprescindible en el cinturón del caballista.

Navaja con alicate de corte para alambres, hoja de 7 cm.

• Hoy tenemos nuevas noticias sobre «la navaja del caballista». En una reunión con mi compadre José María y toda su familia reunida en el campo de mi ahijada Babi, entre las muchas charlas de familia, no podía faltar el hablar de caballos y sus consecuencias, ya que nuestra niña, ya toda una mujercita, Patricia, está empezando en la disciplina donde su padre, abuelo y su tato, tanto han competido.

 

• Pues en una de estas charlas, salió lo del uso de la navaja en el mundo del caballo. Resulta que un amigo de Patri, Juan García «El Vinagre» también caballista, un autodidacta que maneja todos los palos y manejo de cualquier problema físico ó mecánico, que sufrió un grave accidente con un caballo, quedando los dos, jinete y caballo, enredados en una vallado de alambres de espinos, y aquí está la nueva enseñanza de la navaja.

• Pero esta vez, no una simple navaja, para suerte del jinete, llevaba una navaja multiusos,  la que le salvó de un gravisimo accidente tras el primer percance, y os lo explico. Resulta que al sufrir la caída del caballo sobre la alambrada de alambres de espinos, tanto el como el caballo quedaron enredados entre los alambres, y gracias a la tranquilidad del caballista y del caballo, el jinete pudo sacar su navaja multiuso he ir cortando, poco a poco, los alambres que los unía a la valla y quedar libre de estos.

 

• ¿Os podéis figurar, si ese caballo entra en pánico y empieza a intentar soltarse el solo de los alambres? ¿Que le hubiera pasado al jinete y al mismo caballo?.  Pero la pericia del jinete, sirvió para tranquilizar al caballo, y tranquilizarse el, que el entripado lo llevaría el por dentro, y solucionar el grave problema antes de que las cosas llegara a mayores.

 

• Ya que un caballo atrapado por unos alambres, lo primero que intenta es tirar y tirar para soltarse de las tenazas del alambre, y que si además es de espino que le hieren en sus carnes, peor es el problema. Pero la NAVAJA SALVADORA hizo su efecto y salvó a los dos de un gravisimo accidente.

 

• Para que veáis los problemas que puede solucionar una navaja en el cinturón de un caballista, aunque ahora tendremos que cambiar la nuestra, por una navaja multiusos,(con menos de 11 cm de hoja) ya que ante este accidente, nunca sabemos lo que tendremos que cortar.

Y ante la consulta de un lector, hemos tenido que acudir a la legislación vigente, ya que le han dicho que toda navaja está prohibida, y esto es lo que dice la ley: (También se prohíbe la comercialización, publicidad, compraventa, tenencia y uso de las navajas no automáticas cuya hoja exceda de 11 centímetros, medidos desde el reborde o tope del mango hasta el extremo.) Artículo 5. del Real Decreto 137/1993, de 29 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de Armas.

Es decir, que toda navaja que no tenga más de 11 cm de hoja, ESTÁ PERMITIDA.  Tampoco necesitamos más hoja de navaja, para el uso que le vamos a dar, y así estar dentro de las normativas legales.

Saludos de Gabriel.