Crónica del XVIII Raid Hípico «Comarca de Tarazona y Moncayo», (Zaragoza).

Crónica del XVIII Raid «Comarca de Tarazona y Moncayo», (Zaragoza).

Desde el Centro de Turismo Ecuestre Campo Alegre en Novallas (Zaragoza), donde se ha celebrado el XVIII Raid Hípico «Comarca de Tarazona y Moncayo», Campeonato de Aragón 2019 y la final de la Liga Cuatro Autonomías Piensos Muga 2019, Mabel Ruiz, me remite una crónica que escribe  Elvira Notivol, uno de los componentes de su Equipo de Raid. Esta prueba, Campeonato de Aragón y final del Trofeo 4 Autonomías, se celebró este pasado sábado día 26 de Octubre de 2019.

Esta es la crónica de Elvira:

«XVIII Raid Comarca de Tarazona y Moncayo Campeonato de Aragón 2019 Liga Cuatro Autonomías Piensos Muga
26/10/2019
Centro de Turismo Ecuestre
Campo Alegre en Novallas (Zaragoza).
EQUIPO CAMPO ALEGRE con mayúsculas.
Este sábado tuvo lugar en el centro hípico Campo Alegre un evento deportivo ecuestre llamado “raid”, o bien “endurance” – el vocablo del inglés que viene a querer decir “resistencia”. En nuestra hípica hay un Equipo de Raid compuesto por 13 amazonas y jinetes de diversas edades. Once de ellos participaron como corredores:

Concurso Ecuestre Autonómico Promoción (CEA-P) 40 km [45 km en realidad] Darío, Meritxell, Nadia, Pedro y Scarlata.

Concurso Ecuestre Autonómico Promoción (CEA-P) 60 km [67,5 km en realidad] Elena, Elías y Elvira.

Concurso Ecuestre Autonómico 0* y 1* [84,5 km exactamente] Erik, Haizea e Ireneo.

Los preparativos corrieron a cargo de Mabel Ruiz y José Ángel Jiménez, los propietarios de la hípica. En las diecisiete ediciones anteriores este acontecimiento deportivo estuvo muy bien organizado y esta vez no podía ser menos, superando incluso las anteriores.

Todo funcionó a la perfección y fue muy alabado por los participantes de casa y los foráneos: Cabe destacar los nuevos trazados de los recorridos, acordes con el enorme esfuerzo que se demanda de los équidos, y su impecable señalización; la disposición de los elementos necesarios para la adecuada recuperación de los caballos a la llegada; la instalación de la carpa centro de trabajo de los jueces, pensado en facilitar su cometido; la ubicación y acomodo de los vestuarios y ducha; la zona bar para visitantes, asistencias, colaboradores y corredores etc. Quienes se acercan a hacernos compañía, quienes trabajan para que la prueba discurra correctamente
y quienes participan en ella disfrutan mucho más y realizan mejor su cometido cuando todo fluye por estar bien preparado.

¡¡Enhorabuena a los dos principales organizadores de este raid!!

Las condiciones meteorológicas fueron óptimas, dado que ni el calor ni el frío hicieron más complicada la tarea de los équidos en sus largos recorridos. Entre nosotros bromeábamos diciendo que habíamos “encargado” un precioso día otoñal.

Las tres pruebas discurrieron sin percance alguno, de lo cual nos felicitamos, dado que son muchos kilómetros a recorrer y mucho tiempo trabajando y avanzando hacia la meta.

Hasta aquí me he referido a lo imprescindible, lo necesario: el preparativo de la sede. Queda lo importante, queda el corazón. ¿Por dónde empezar? ¿Por la fuerza transmiten los amigos, visitantes y, sobre todo, asistencias, con su ánimos en palabras y gestos, con su calor y cariño? Es sin duda un buen principio.

Ayudan a no pensar en la dureza, a seguir en tu nube. ¿Qué nube? … ¡Si supieseis lo que es ir a caballo en trote sostenido, uno con tu équido, sintiéndote parte de tu equipo! El tiempo no corre, solo piensas en tu ritmo acompasándolo con el del animal, solo ves a tus compañeros de equipo y no hay ningún otro lugar en el que quieras estar. ¡Puro mindfulness! Centrados en la carrera, observamos el estado de los caballos de los demás, nos comprobamos las herraduras mutuamente, nos turnamos a ir en cabeza llevando la responsabilidad del ritmo, nos advertimos de dificultades en el camino y peligros potenciales, nos aconsejamos velocidad. Trabajamos en armonía, como se nos ha enseñado – el equipo es lo que prima, porque la armonía nos ayuda a que todo fluya. Creemos en el esfuerzo en equipo. Por ello, la actitud vigilante sobre el bienestar de los caballos de nuestro grupo la extendemos a los binomios de nuestros competidores y les tratamos como si fueran de nuestro grupo desde la competición leal. Así se nos ha enseñado. Es nuestra manera de enfrentarnos a un raid. Nuestro modo de competir.

Nuestro triunfo es clasificar el caballo, es decir, acabar la última fase y que los veterinarios den su visto bueno al estado del caballo. En este raid nosotros clasificamos diez de los once caballos. ¡No está nada mal! ¿Y por qué no? ¡Qué alegría cuando subimos al pódium! Ese fue el caso … y en varias ocasiones. Mira este vínculo para conocer todas nuestras proezas 🙂

Si no tuviste ocasión de venir a acompañarnos este pasado sábado, ven al año que viene. Campo Alegre, Novallas. Ya te hemos echado en falta.
Elvira Notivol, Miembro del Equipo de Raid Campo Alegre»

Gracias Mabel por remitirme esta crónica y a Elvira por toda la información que nos ha dado en su crónica de esta prueba.

Saludos de Gabriel.

Gabriel Gamiz

Jinete de Raid Juez de Raid

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